Foto: Thinkstock
Todas usamos vestidos, nos encantan los bolsos, las blusas con transparencias… Pero, si tuviéramos que elegir una sola prenda, ésa que no debe faltar en nuestro guardarropa por ninguna razón, lo más probable es que nos decidamos por unos jeans. Y es que los pantalones vaqueros son tan comunes hoy día que resulta casi imposible imaginar nuestra vida sin ellos.
¿Alguna vez te has preguntado cuál es el origen de esta versátil prenda y por qué se ha convertido en nuestra aliada inseparable? Los jeans fueron en un principio una prenda de trabajo, utilizada por los obreros por la alta resistencia de su tela. El genio detrás de la tela de los vaqueros fue Jacob Davis, un sastre letonés que residía en Estados Unidos.
Después de experimentar con varios materiales, Jacob descubrió que la mezclilla era, además de muy cómoda, sumamente resistente a los golpes, rasguños y al paso del tiempo. Entonces buscó a alguien que quisiera patentar su descubrimiento, y fue así como conoció a Levi Strauss, cuya compañía, Levi’s, se convirtió en el referente de los pantalones vaqueros en el mundo.
Acompáñanos en este recorrido por la historia de los pantalones de mezclilla.
Foto: Cortesía Levi's
Levi Strauss & Co. Creó folletos sobre la ropa de trabajo para que los vendedores repartieran en distintos territorios. En la imagen, uno de los primeros folletos publicitarios.
Foto: Cortesía Levi's
Imagen propagandística de la compañía en los tiempos de guerra. Es el dibujo de un vaquero con sus Levi’s bien puestos mientras arrea el ganado que alimenta a la población. Abajo, un mensaje discreto lee: compra fondos de ahorro para la guerra”.
Foto: Cortesía Levi's
Pudo haber sido la Guerra Fría, pero de alguna manera los jeans Levi’s encontraron su camino a Moscuó en 1959 como parte de un tratado de comercio internacional. “Los vaqueros locales”, vestidos con mezclilla, eran todo un espectáculo en las ferias.
Foto: Cortesía Levi'
Levi Strauss, un inmigrante que vivía en San Francisco, se convirtió en 1850 en uno de los comerciantes más respetados de la ciudad. En 1873 su visión le permitió dar a luz a la primera mezclilla azul del mundo, en colaboración con otro inmigrante, el sastre Jacob Davis.
Foto: Cortesía Levi
El staff de Levi-Strauss posa orgulloso en 1880 frente a la sede de varios pisos de la empresa, que vendía productos al mayoreo. Veinte años después el edificio sobreviviría el gran terremoto de 1906, pero no un incendio que tendría lugar en un par de años más tarde.
Foto: Cortesía Levi's
Durante la Segunda Guerra Mundial los fabricantes de ropa, incluyendo Levi Strauss & Co., tuvieron que reducir su producción para ahorrar materias primas debido a los esfuerzos destinados a la guerra. Incluso cuando la guerra terminó, tomó un gran tiempo que la producción retomara su ritmo normal. En la foto: cuando una tienda tenía jeans y chamarras Levi’s, la gente abarrotaba las entradas.
Foto: Cortesía Levi's
Tarjetas comerciales como ésta fueron los regalos de compra en la década de 1890. Las empresas acostumbraban crear tarjetas para regalar a sus clientes en la compra de sus prodctos. Años más tarde se convertirían en piezas de colección.
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Los mineros se encontraban entre los principales clientes de esta ropa de trabajo, que debutó en 1873. En la foto, mineros de las minas La Grange, en California, posan para una foto usando sus atuendos de trabajo.
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1930: las mujeres del oeste amaban los pantalones vaqueros. En la foto, unas chicas posan orgullosas en un rodeo de California usando jeans Levi’s.
Foto: Cortesía Levi's
El jean original 501, hecho por los obreros del oeste, nacido en 1873. Este estilo incorporaba un bolsillo en el frente, pensado para los hombres que trabajaban en fábricas.
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